La Gloria es de Dios por extraordinario Cierre del Plan Vacaciones con Cristo 2018.
Asi lo dió a conocer el Maestro y Coordinador general del Ministerio Infantil "Los Niños del Rey de Reyes",Prof. Frank Jhonattan Weffer en la que manifestó su agradecimiento a Dios por su respaldo desde el Inicio del Plan en el Mes de Agosto.
Por su parte reconoció, la labor de los maestros y maestras que fueron parte en el desarrollo de las actividades que se dieron todos los sabados a partir de las 9 am, Dios bendiga a nuestros maestros y maestras, dijo Weffer.
Esperamos que para el proximo año, sea mejor, con mas niños y niñas y con mas participación de maestros y maestras.
martes, 25 de septiembre de 2018
domingo, 23 de septiembre de 2018
Responsabilidades Administrativas de los Padres para con Dios por los Hijos.
Por: Prof. Frank Jhonattan Weffer
Tema: La Administración sobre los Hijos.
Texto: Salmo 127. 3 y Proverbios 17.6
Salmo
127. 3
He
aquí, herencia de Jehová son los hijos;
Cosa de estima el fruto del vientre.
Proverbios
17. 6
Corona
de los viejos son los nietos,
Y la honra de los hijos, sus padres.
Título: Responsabilidades Administrativas de los Padres para con Dios
por los Hijos.
De los padres para los Hijos
1. Velar, orar e interceder por ellos.
Job 1. 5
Y acontecía que habiendo pasado
en turno los días del convite, Job enviaba y los santificaba, y se levantaba de
mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque decía
Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus
corazones. De esta manera hacía todos los días.
Marcos 5. 23
Y le rogaba mucho, diciendo: Mi
hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y
vivirá.
Glosario:
Convite:
Función y especialmente comida o banquete a que es convidado alguien.
2. En enseñarlos a ser laboriosos y trabajadores
Proverbios 22. 6
Instruye
al niño en su camino,
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
Glosario:
Instruir: Enseñar,
Doctrinar, comunicar ideas y conocimientos.
3. Corrígelos por amor y sin lastima
Proverbios
13. 24
El que
detiene el castigo, a su hijo aborrece;
Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.
Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.
Proverbios
19. 18
Castiga
a tu hijo en tanto que hay esperanza;
Mas no se apresure tu alma para destruirlo.
Mas no se apresure tu alma para destruirlo.
Proverbios
22.15
La
necedad está ligada en el corazón del muchacho;
Mas la vara de la corrección la alejará de él.
Mas la vara de la corrección la alejará de él.
Proverbios
23. 13
No
rehúses corregir al muchacho;
Porque si lo castigas con vara, no morirá.
14 Lo castigarás con vara,
Y librarás su alma del Seol.
Porque si lo castigas con vara, no morirá.
14 Lo castigarás con vara,
Y librarás su alma del Seol.
Proverbios
29. 15
La
vara y la corrección dan sabiduría;
Mas el muchacho consentido avergonzará a su madre.
Mas el muchacho consentido avergonzará a su madre.
Glosario:
Necedad: Ignorancia,
imprudente o falto de razón, terco y porfiado.
4.
Edificarlos
durante la corrección
Efesios
5. 4
Y vosotros, padres, no provoquéis
a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.
Glosario:
Ira: Enfadarse
o irritarse mucho.
5.
Traspaso del conocimiento y la experiencia a la nueva generación
Deuteronomio 4. 9
Por tanto, guárdate, y guarda tu
alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han
visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las
enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.
Joel 1. 3
De esto contaréis a vuestros
hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra
generación.
Salmo 78. 4
No las
encubriremos a sus hijos,
Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová,
Y su potencia, y las maravillas que hizo.
Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová,
Y su potencia, y las maravillas que hizo.
6. El
temor y el reconocimiento a Dios
1 Crónicas 28. 9
Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce
al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario;
porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los
pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; más si lo dejares, él te
desechará para siempre.
7. Ora y Profetiza sobre ellos por fe
Hebreos 11. 20
Por la fe bendijo Isaac a Jacob y
a Esaú respecto a cosas venideras.
Génesis 17. 18
Y dijo Abraham a Dios: Ojalá
Ismael viva delante de ti.
Glosario:
Fe:
Certeza de lo que se espera convicción de lo que no se ve (Hb. 11.1)
8.
Abastécelos en lo necesario para su desarrollo
1 Timoteo 5. 8
Porque si alguno no provee para
los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un
incrédulo.
9.
Preséntalos y dedícalos al Señor
Lucas 2. 22
Y cuando se cumplieron los días
de la purificación de ellos, conforme a la ley de Moisés, le trajeron a
Jerusalén para presentarle al Señor.
1 Samuel 1. 26-28
26 Y ella dijo: ¡Oh, señor mío!
Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti orando
a Jehová.
27 Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí.
28 Yo, pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová.
27 Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí.
28 Yo, pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová.
10. Encamínalos hacia la búsqueda del Señor
Mateo 19. 14
Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los
tales es el reino de los cielos.
11.
Jamás abandones y menosprecies a tu(s) hijo(s)
Mateo 18. 10
Mirad que no
menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los
cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos.
12. Aplicar una enseñanza en Valores
Tito 2. 4-6
4 que enseñen a las mujeres
jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos,
5 a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.
6 Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes;
5 a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.
6 Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes;
13.
No te burles y agredas su corazón y dignidad
Efesios 6.4
Y vosotros, padres, no provoquéis
a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del
Señor.
Colosenses 3. 21
Padres, no exasperéis a vuestros
hijos, para que no se desalienten.
14. Alértalos
de los peligros en la sociedad
Proverbios 07. 1-27
1 Hijo mío, guarda mis razones,
Y atesora contigo mis mandamientos.
2 Guarda mis mandamientos y vivirás,
Y mi ley como las niñas de tus ojos.
3 Lígalos a tus dedos;
Escríbelos en la tabla de tu corazón.
4 Di a la sabiduría: Tú eres mi hermana,
Y a la inteligencia llama parienta;
5 Para que te guarden de la mujer ajena,
Y de la extraña que ablanda sus palabras.
6 Porque mirando yo por la ventana de mi casa,
Por mi celosía,
7 Vi entre los simples,
Consideré entre los jóvenes,
A un joven falto de entendimiento,
8 El cual pasaba por la calle, junto a la esquina,
E iba camino a la casa de ella,
9 A la tarde del día, cuando ya oscurecía,
En la oscuridad y tinieblas de la noche.
10 Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro,
Con atavío de ramera y astuta de corazón.
11 Alborotadora y rencillosa,
Sus pies no pueden estar en casa;
12 Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas,
Acechando por todas las esquinas.
13 Se asió de él, y le besó.
Con semblante descarado le dijo:
14 Sacrificios de paz había prometido,
Hoy he pagado mis votos;
15 Por tanto, he salido a encontrarte,
Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado.
16 He adornado mi cama con colchas
Recamadas con cordoncillo de Egipto;
17 He perfumado mi cámara
Con mirra, áloes y canela.
18 Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana;
Alegrémonos en amores.
19 Porque el marido no está en casa;
Se ha ido a un largo viaje.
20 La bolsa de dinero llevó en su mano;
El día señalado volverá a su casa.
21 Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras,
Le obligó con la zalamería de sus labios.
22 Al punto se marchó tras ella,
Como va el buey al degolladero,
Y como el necio a las prisiones para ser castigado;
23 Como el ave que se apresura a la red,
Y no sabe que es contra su vida,
Hasta que la saeta traspasa su corazón.
24 Ahora pues, hijos, oídme,
Y estad atentos a las razones de mi boca.
25 No se aparte tu corazón a sus caminos;
No yerres en sus veredas.
26 Porque a muchos ha hecho caer heridos,
Y aun los más fuertes han sido muertos por ella.
27 Camino al Seol es su casa,
Que conduce a las cámaras de la muerte.
Y atesora contigo mis mandamientos.
2 Guarda mis mandamientos y vivirás,
Y mi ley como las niñas de tus ojos.
3 Lígalos a tus dedos;
Escríbelos en la tabla de tu corazón.
4 Di a la sabiduría: Tú eres mi hermana,
Y a la inteligencia llama parienta;
5 Para que te guarden de la mujer ajena,
Y de la extraña que ablanda sus palabras.
6 Porque mirando yo por la ventana de mi casa,
Por mi celosía,
7 Vi entre los simples,
Consideré entre los jóvenes,
A un joven falto de entendimiento,
8 El cual pasaba por la calle, junto a la esquina,
E iba camino a la casa de ella,
9 A la tarde del día, cuando ya oscurecía,
En la oscuridad y tinieblas de la noche.
10 Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro,
Con atavío de ramera y astuta de corazón.
11 Alborotadora y rencillosa,
Sus pies no pueden estar en casa;
12 Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas,
Acechando por todas las esquinas.
13 Se asió de él, y le besó.
Con semblante descarado le dijo:
14 Sacrificios de paz había prometido,
Hoy he pagado mis votos;
15 Por tanto, he salido a encontrarte,
Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado.
16 He adornado mi cama con colchas
Recamadas con cordoncillo de Egipto;
17 He perfumado mi cámara
Con mirra, áloes y canela.
18 Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana;
Alegrémonos en amores.
19 Porque el marido no está en casa;
Se ha ido a un largo viaje.
20 La bolsa de dinero llevó en su mano;
El día señalado volverá a su casa.
21 Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras,
Le obligó con la zalamería de sus labios.
22 Al punto se marchó tras ella,
Como va el buey al degolladero,
Y como el necio a las prisiones para ser castigado;
23 Como el ave que se apresura a la red,
Y no sabe que es contra su vida,
Hasta que la saeta traspasa su corazón.
24 Ahora pues, hijos, oídme,
Y estad atentos a las razones de mi boca.
25 No se aparte tu corazón a sus caminos;
No yerres en sus veredas.
26 Porque a muchos ha hecho caer heridos,
Y aun los más fuertes han sido muertos por ella.
27 Camino al Seol es su casa,
Que conduce a las cámaras de la muerte.
15.
Atesora para el futuro de tus hijos
2 Corintios 12. 14
He aquí, por tercera vez estoy
preparado para ir a vosotros; y no os seré gravoso, porque no busco lo vuestro,
sino a vosotros, pues no deben atesorar los hijos para los padres, sino los
padres para los hijos.
16.
Compadécete de tus hijos
Salmo 103. 13
Como
el padre se compadece de los hijos,
Se compadece Jehová de los que le temen.
Se compadece Jehová de los que le temen.
Conclusión
Salmo 127.1
1 Si Jehová no edificare la casa,
En vano trabajan los que la edifican;
Si Jehová no guardare la ciudad,
En vano vela la guardia.
En vano trabajan los que la edifican;
Si Jehová no guardare la ciudad,
En vano vela la guardia.
Salmos
112. 2
Su descendencia será poderosa en
la tierra;
La generación de los rectos será bendita.
La generación de los rectos será bendita.
jueves, 20 de septiembre de 2018
Lo que la Bilia dice sobre el deber de los padres a los niños
Lo que la Bilia dice sobre el deber de los padres a los
niños
Tito 2:4
que
enseñen a las jóvenes a que amen a sus maridos, a que amen a sus hijos,
Mateo 19:13-14
Entonces
le trajeron {algunos} niños para que pusiera las manos sobre ellos y orara; y
los discípulos los reprendieron. Pero Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les
impidáis que vengan a mí, porque de los que son como éstos es el reino de los
cielos.
Proverbios 22:6
Enseña al
niño el camino en que debe andar, y aun cuando sea viejo no se apartará de él.
Efesios 6:4
Y
{vosotros,} padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la
disciplina e instrucción del Señor.
Deuteronomio 4:9
Por
tanto, cuídate y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las
cosas que tus ojos han visto, y no se aparten de tu corazón todos los días de
tu vida; sino que las hagas saber a tus hijos y a tus nietos.
Deuteronomio 11:19
Y
enseñadlas a vuestros hijos, hablando de ellas cuando te sientes en tu casa y
cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.
Isaías 38:19
El que
vive, el que vive es el que te da gracias, como yo lo hago hoy. El padre cuenta
a sus hijos tu fidelidad.
Joel 1:3
Contadlo
a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la siguiente
generación.
Éxodo 10:2
y para
que cuentes a tu hijo y a tu nieto, cómo me he burlado de los egipcios, y cómo
he mostrado mis señales entre ellos, y para que sepáis que yo soy el SEÑOR.
Salmos 78:4
No {lo}
ocultaremos a sus hijos, sino que contaremos a la generación venidera las
alabanzas del SEÑOR, su poder y las maravillas que hizo.
1 Crónicas 28:9
En cuanto
a ti, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele de todo
corazón y con ánimo dispuesto; porque el SEÑOR escudriña todos los corazones, y
entiende todo intento de los pensamientos. Si le buscas, El te dejará
encontrarle; pero si le abandonas, El te rechazará para siempre.
Génesis 48:15
Y bendijo
a José, y dijo: El Dios delante de quien anduvieron mis padres Abraham e Isaac,
el Dios que ha sido mi pastor toda mi vida hasta este día,
Hebreos 11:20
Por la fe
bendijo Isaac a Jacob y a Esaú, aun respecto a cosas futuras.
Salmos 103:13
Como un
padre se compadece de {sus} hijos, así se compadece el SEÑOR de los que le
temen.
Job 42:15
Y en toda
la tierra no se encontraban mujeres tan hermosas como las hijas de Job; y su
padre les dio herencia entre sus hermanos.
1
Timoteo 5:8
Pero si
alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, ha negado
la fe y es peor que un incrédulo.
1 Timoteo 3:4
Que
gobierne bien su casa, teniendo a sus hijos sujetos con toda dignidad
Proverbios 13:24
El que escatima la vara odia a su hijo, mas el que
lo ama lo disciplina con diligencia.
Proverbios 19:18
Corrige a tu hijo mientras hay esperanza, pero no
desee tu alma causarle la muerte.
Proverbios 23:13
No escatimes la disciplina del niño; aunque lo
castigues con vara, no morirá.
Proverbios 29:17
Corrige a tu hijo y te dará descanso, y dará
alegría a tu alma.
Hebreos 12:7
Es para
{vuestra} corrección que sufrís; Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo
hay a quien {su} padre no discipline?
Colosenses 3:21
Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no
se desalienten.
Génesis 24:1-4
Abraham
era viejo, entrado en años; y el SEÑOR había bendecido a Abraham en todo. Y
Abraham dijo a su siervo, el más viejo de su casa, que era mayordomo de todo lo
que poseía: Te ruego que pongas tu mano debajo de mi muslo, y te haré jurar por
el SEÑOR, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás mujer para mi
hijo de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito; Leer
más.
Génesis 28:1-2
Y llamó
Isaac a Jacob, lo bendijo y le ordenó, diciendo: No tomarás mujer de entre las
hijas de Canaán. Levántate, ve a Padán-aram, a casa de Betuel, padre de tu
madre; y toma de allí mujer de entre las hijas de Labán, hermano de tu madre.
Génesis 17:18
Y dijo
Abraham a Dios: ¡Ojalá que Ismael viva delante de ti!
1 Crónicas 29:19
y da a mi
hijo Salomón un corazón perfecto para que guarde tus mandamientos, tus
testimonios y tus estatutos, para que {los} cumpla todos y edifique el templo,
para el cual he provisto.
Job 1:5
Y sucedía
que cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba {a buscarlos} y los
santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos {conforme} al número
de todos ellos. Porque Job decía: Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a
Dios en sus corazones. Así hacía Job siempre.
2 Samuel 12:16
David
rogó a Dios por el niño; y ayunó, y fue y pasó la noche acostado en el suelo.
Marcos 5:23
Y le
rogaba* con insistencia, diciendo: Mi hijita está al borde de la muerte; {te
ruego} que vengas y pongas las manos sobre ella para que sane y viva.
Juan 4:46
Entonces
vino otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y
había {allí} cierto oficial del rey cuyo hijo estaba enfermo en Capernaúm.
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